El verano llega a su fin. En las tiendas de moda ya están listas las nuevas colecciones de otoño y, con sólo mirar los escaparates, los maniquíes nos transportan al frío invierno. Llega el temido entretiempo, esas fechas en que unos llevan sandalias y bermudas y otros ya se calzan las botas. Esa época en la que uno no sabe qué ponerse y que nos visita dos veces al año.
En moda, parece que hace tiempo que el concepto de entretiempo desapareció y nos cuesta encontrar prendas funcionales para esta época del año. Así, uno debe convertirse en un maestro del arte de vestir cual cebolla, es decir, a capas de quita y pon para sobrevivir a los cambios de temperatura.
Funte: El País
Ya lo dicen los expertos, el otoño es la época más difícil para renovar el armario. ¿La solución? Prendas básicas que se puedan combinar de distintas formas y que sobrevivan de una año a otro.
Lo primero, no vestirse sin planificación y los mejores aliados las chaquetas y pañuelos. Una cazadora o un cardigan pueden salvarte de muchas situaciones cuando el sol se esconde y empieza a anochecer.
El foulard es otro gran amigo de entretiempo, ya sea en versión sport o para dar un toque distinguido, además de protegerte del frío.
En esta época las faldas suelen quedar en el armario, puesto que no sabes si ponértelas con medias o sin medias. Para sustituirlas, vaqueros y leggins, aunque este otoño vienen los pantalones más anchos y de corte masculino.
¿Y los pies? Pues a tirar de deportivas, bailarinas y sandalias cuando no llueva y luzca el sol.
Pero, ¿tú que opinas? ¿Es fácil encontrar moda de entretiempo?