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Día Internacional del Inventor: Inventos y moda

Mañana, 9 de noviembre, se celebra el Día del Internacional del Inventor. Un nueve de noviembre de 1914 nació la ingeniera e inventora Hedy Lamarr, coinventora de la primera versión del espectro ensanchado que permitiría las comunicaciones inalámbricas de larga distancia. Lamarr fue precursora en los años 40 del pasado siglo del conmutador de frecuencias, de la telefonía 3G, de la comunicación por radio y hasta de unas incipientes bases para desarrollar el moderno wifi. La fecha, el 9 de noviembre, fue proclamada por el inventor y empresario alemán Gerhard Muthenthaler.

Para conmemorar este día, hemos escogido algunos de los inventos más significativos que han revolucionado el mundo de la moda. Así que ahí va, una de inventos y moda.

Inventos y moda: la máquina de coser

Una invención sin la que, en definitiva, la industria de la moda no sería la misma. La máquina de coser fue inventada por Elias Howe, un inventor americano que logró patentar una máquina de coser mejorada en el año de 1846. Su mecanismo, a diferencia de los creados años atrás, usaba dos hilos separados, lo que permitía mucha mayor calidad en la puntada.

Howe no logró prosperar e Isaac Singer, mediante la realización de pequeñas modificaciones a la creación original de Howe, logró crear un negocio altamente rentable que se mantiene en la actualidad.

Inventos y moda: las medias de nylon

Hasta principios del siglo XX las mujeres sólo tenían dos opciones: las medias de lana y las medias de seda, que eran poco duraderas. En 1935, los químicos de la empresa estadounidense DuPont presentaron al mundo el nylon, una fibra que prometía ser “más fuerte que el acero y más delgada que una telaraña“. Las medias de nylon se vendieron rápidamente, eran resistentes y no costaban mucho.

Al iniciarse la Segunda Guerra Mundial, se paralizó el uso del nylon para la confección de medias y su producción fue declarada de uso exclusivo, por parte del Gobierno de Estados Unidos, para la fabricación de materiales de guerra, tales como paracaídas o cinturones para camiones. Durante aquella época, las medias eran tan escasas en el mercado que cada par se vendía a 20 dólares, cuando antes había costado uno.

Inventos y moda: la cremallera

La invención de la cremallera puede adjudicarse a dos personas: el estadounidense Whitcomb Judson y el sueco Gideon Sundbäck. Si bien el inventor norteamericano fue el primero en diseñar un mecanismo muy similar al que hoy conocemos como cremallera, fue el inventor de Suecia el que realizó el diseño definitivo.

La cremallera de Judson tenía tendencia a abrirse en los momentos más inoportunos. Éste creyó resolver el problema de la abertura incontrolada, pero cuando su secretaria  se la probó necesitó un gancho para asegurarla. Así que el trabajo continuó hasta 1908.

Entonces apareció en escena el ingeniero sueco Gideon Sundback. Hasta entonces el trabajo se había basado en la idea de los corchetes y Sundback la siguió, pero no tuvo éxito y decidió probar algo diferente. Así que estuvo trabajando en el diseño de la cremallera entre los años 1906 y 1914. Finalmente presentó la patente en agosto de 1914.

Más tarde, un antiguo aparato similar a la cremallera, «un cierre de ropa automático, continuo», fue patentado por Elias Howe en 1851, pero no era práctico y no llegó al mercado.

Judson patentó en 1891 o 1893 un Clasp Locker2​ similar para sostener botas y zapatos y vendió su invento a través de la compañía Universal Fastener. Estos dos diseños usaban ganchos y ojos.

La cremallera se hizo popular para la ropa de niños y los pantalones de hombres en las décadas de los 1920 y 1930.

Lo que está por llegar: zapatos con tacón inteligente

Es uno de los inventos más esperados en la industria de la moda. La empresa Zhor-Tech puso en el mercado un calzado inteligente con sensores, audio y luz. Pero lo mejor de todo reside en su comodidad: plantillas calientes y tacones mecánicos para regular la altura. Funcionan con una aplicación y su uso es tan simple como bajar o subir los niveles, aunque eso sí, pesan más que unos tacones convencionales.

El Traje Antiarrugas para Hombre

Se acabó el drama del traje arrugado en la maleta. Los trucos como utilizar vapor del agua caliente del baño para alisarlo quedarán atrás con el traje antiarrugas.

Este tipo de trajes ya hace años que se inventaron, pero suelen resultar terriblemente caros, entre 250 y 400 euros los más baratos. Zara lanzó un Traje Antiarrugas para Hombre por menos de 90 euros.

 

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